
Si vas a pasar al menos un par de días en Venecia, seguro que has pensado en acercarte a pasar la mañana a sus bonitas islas vecinas: Murano y Burano. En este post te contamos cómo puedes visitarlas y qué ver en ambas ¡Sigue leyendo!
¿Por libre o con un tour?
Lo primero que tendrás que decidir es si vas a Murano y Burano por tu cuenta o con una visita guiada. Ambas formas tienen sus pros y sus contras, pero nosotros te recomendamos que elijas la primera. El trayecto es muy sencillo y económico (te damos más detalles en el siguiente apartado). Además, podrás organizarte como tú prefieras.
No obstante, siquieres ir a tiro hecho, tienes la opción de coger un tour de medio día. GetYourGuide, Civitatis y otras empresas turísticas los ofrecen por unos 20€. Suelen ser por la mañana e incluyen una visita a una fábrica de cristal en Murano. También existe la posibilidad de hacer una parada en Torcello, otra isla cercana.
Pero ten en cuenta que estarás sujeto a un horario. Es decir, tendrás que empezar la excursión a la hora que ellos te marquen y no podrás detenerte todo el tiempo que quieras en cada isla.
Cómo llegar por tu cuenta a Burano y Murano
Para ir de Venecia a Murano y Burano tendrás que coger el vaporetto, una especie de autobús acuático. Hay varias líneas que te llevarán a estas islas:
- Vaporetto 4.1: este vaporetto va casi directo desde la estación de Fondamente Nove, en el barrio de Cannaregio, hasta Murano y viceversa. A lo largo de la isla hace varias paradas. Para visitarla da un poco igual en cuál te subas o te bajes. Nosotros nos decantamos por Murano Museo porque nos pareció la más céntrica. Presta servicio más o menos desde las 4:00 hasta las 23:00.
- Vaporetto 4.2: el recorrido de esta línea es bastante similar a la anterior, ya que también lleva a Murano. La principal diferencia y quizá la más importante a nivel turístico es que puedes montarte en San Zaccaria, una parada a menos de 5 minutos a pie de la Plaza San Marcos. Opera aproximadamente desde las 6:30 hasta las 18:30.
- Vaporetto 12: este número es el único que durante el día te servirá para ir tanto a Murano como a Burano. Solo hace una parada en cada una de las islas. También puedes cogerlo si tienes en mente visitar Torcello. Como los números anteriores, puedes pillarlo a la ida y/o bajarte a la vuelta en Fondamente Nove. Pasa más o menos desde las 4:00 hasta las 22:30.
- Vaporetto 13: es otra opción más que tienes para ir solo hasta Murano. Al igual que los demás, hace parada en Fondamente Nove de 4:30 a 22:30.
- Vaporetto nocturno: aunque no creemos que lo vayas a coger, ten en cuenta que si se te hace tarde cuentas con un servicio de autobús acuático nocturno. El primero sale sobre las 23:30 pasadas. El último comienza su recorrido en torno a las 4:00.
Los horarios que te hemos puesto son orientativos, ya que suelen cambiar bastante a lo largo del año. Puedes consultarlos en la web oficial del transporte público de Venecia o en la app gratuita Actv. Está disponible para iPhone y Android.
En ambos sitios también podrás ver con qué frecuencia pasan (no siempre es igual), así como echar un ojo a todas las paradas de cada número. Puede que a ti te interese más alguna que no te hemos mencionado.
Por cierto, de las dos islas, Burano es la que se encuentra más lejos de Venecia. Se tarda más o menos unos 45 minutos en llegar. La duración del trayecto hasta Murano varía en función del vaporetto que cojas, pero aproximadamente es de 15 minutos.
Te recomendamos que te hagas con la tarjeta de transporte Venezia Unica. La de un día tiene un precio de 20€ y te permite hacer todos los viajes que tú quieras en vaporetto. Con solo subirte 3 veces la habrás amortizado, ya que el billete sencillo cuesta 7,5€. Puedes sacarla directamente en las máquinas automáticas que hay en cualquier parada.
Qué ver en Burano
La vida en Murano no suele empezar hasta las 10:30. Por eso te recomendamos que empieces tu excursión por Burano. Igualmente te aconsejamos que pongas el despertador temprano. Así podrás aprovechar bien la mañana y evitarás las aglomeraciones de gente, especialmente en verano.
Esta islita es famosa por sus casas de colores. Según cuentan, hace siglos los pescadores decidieron pintar sus domicilios para poder encontrarlos con facilidad cuando había niebla. Otra leyenda explica que las personas que eran de la misma familia elegían el mismo color para sus residencias como símbolo de unión. No sabemos si alguna de estas dos historias será cierta, pero desde luego ambas son muy curiosas.
Nuestra mayor recomendación es que pasees con calma por sus canales y callejones para disfrutar del arcoíris que forman. Seguro que te paras en más de una pero, por favor, haz tu visita con respeto. No te asomes por las ventanas o trates de acceder al interior de alguna, aunque esté abierta. En la mayoría siguen viviendo locales.
Si aunque llegues a Murano y Burano desde Venecia por libre quieres recorrer ambas islas de la mano de un local, tienes la opción de hacer un Free Tour. ¡No te olvides de dejarle una propina al guía cuando termine!
Durante tu paseo, puedes aprovechar para entrar en algún comercio local. En la gran mayoría encontrarás ropa, manteles, marcapáginas y otros objetos con encajes, el tejido típico de la zona. Están hechos a mano, así que como puedes imaginarte no son baratos.
Más o menos tardamos 2 horas en recorrer Burano. No obstante, nosotros nos paramos cada dos por tres porque yo quería hacerme una foto en cada casita de color que nos encontrábamos por el camino. Si no te detienes tanto como nosotros, puedes verla con calma en una hora u hora y media.
Qué ver en Murano
Al igual que Burano es reconocido por sus multicolores casitas, Murano es famoso por su cristal. Las calles principales están llenas de tiendas que lo venden en forma de adornos y joyas. Como te hemos dicho en el apartado anterior, suelen abrir sobre las 10:30.
No obstante, no en todos los comercios encontrarás objetos de cristal elaborados en la propia isla. Pero no te preocupes, no hace falta ser un experto para distinguir una falsificación. Solo entra en la web muranoglass.com y mira el mapa con todos los establecimientos que cuentan con un certificado de autenticidad.
También puedes comprobarlo en las propias tiendas. Las piezas originales llevan una etiqueta con el logo de la web acompañada de un código Bidi. Igualmente, podrás deducirlo por el precio. Como los encajes de Burano, el cristal de Murano se fragua a mano.
En las fábricas de vidrio que hay repartidas por todo Murano puedes ver en vivo y en directo cómo lo soplan y lo forjan. Algunas de las más grandes se sitúan cerca de la estación de vaporetto de Colonna.
Sin duda se trata de una experiencia única, pero muy cortita. Los pases tienen una duración de 15-30 minutos. Además, no son gratis. Nos fijamos en que en todos los sitios cobraban por lo menos 3€ por persona.
¿Llega la hora de la comida y sigues en Murano o Burano? No tienes por qué llegar a Venecia con el estómago vacío. En ambas islas hay unas cuantas cafeterías y bares con pizzas, sándwiches, focaccias etc. Puedes pedirlo para llevar o tomártelo ahí mismo. No obstante, esta última opción suele conllevar un suplemento. Asimismo, vimos algún supermercado abierto.
En tu recorrido por Murano también puedes incluir el Museo del Vidrio. Cuenta con una variopinta colección de objetos de diferentes épocas, por supuesto realizadas con el famoso cristal. La mayoría son antiguas donaciones de los talleres de artesanos, aunque algunas las hallaron en las excavaciones que realizaron en la isla sobre el siglo XIX. También hay piezas contemporáneas.
Nosotros decidimos no entrar porque consideramos que la entrada era demasiado cara para lo que ofrece. La general tiene un precio de 12€ y la reducida de 9,5€.
En el caso de que tú quieras ir, ten en cuenta que abre del 1 de noviembre al 31 de marzo de 10:30 a 16:30. A partir del 1 de abril y hasta el 31 de octubre, amplía su horario hasta las 18:00.
En total, estuvimos 3 horas en Murano y eso que básicamente lo único que hicimos fue cotillear escaparates, perdernos por sus calles y comer. Si vas a visitar el museo y/o entrar en una fragua, calcula al menos una hora u hora y media más.
Torcello, un extra en tu excursión
Entre Murano y Burano hay una isla mucho más pequeña y no tan frecuentada por los turistas como las otras: Torcello. Y entendemos un poco por qué. Cuando estábamos planificando nuestro viaje, nos dimos cuenta de que no hay mucho que visitar aquí. Tiene unas cuantas iglesias y un puentecito que se puede ver perfectamente desde el vaporetto.
Como puedes deducir por lo que te acabamos de contar, aunque pasamos por ella con el autobús acuático, no nos paramos. Si tú decides incluir esta islita en tu itinerario, cuéntanoslo en los comentarios. También puedes decirnos si te llama más la atención Murano o Burano, si prefieres ir por libre o con un tour ¡O lo que te apetezca! 🙂





